Gespräche in der Dämmerung 00563
Parte de:
C. (BB) El espíritu [C. (BB) Der Geist] / Capítulo VI: El espíritu [VI. Der Geist] / B. El espíritu extrañado de sí; la formación o Bildung [B. Der sich entfremdete Geist. Die Bildung] / II. La Ilustración [II. Die Aufklärung] / a. La lucha de la Ilustración contra la superstición [a. Der Kampf der Aufklärung mit dem Aberglauben]
[2.f. Polémica de la Ilustración contra la fe, la Ilustración por encima de la fe, dialéctica de la Ilustración; en qué consiste la realización de la intelección pura]
Tabla de contenidos
Gespräche in Jena
[563] Der Glaube hat das göttliche Recht, das Recht der absoluten Sichselbstgleichheit oder des reinen Denkens, gegen die Aufklärung und erfährt von ihr durchaus Unrecht; denn sie verdreht ihn in allen seinen Momenten und macht sie zu etwas anderem, als sie in ihm sind. Sie aber hat nur menschliches Recht gegen ihn und für ihre Wahrheit; denn das Unrecht, das sie begeht, ist das Recht der Ungleichheit und besteht in dem Verkehren und Verändern, ein Recht, das der Natur des Selbstbewußtseins im Gegensatze gegen das einfache Wesen oder das Denken angehört. Aber indem ihr Recht das Recht des Selbstbewußtseins ist, wird sie nicht nur auch ihr Recht behalten, so daß zwei gleiche Rechte des Geistes einander gegenüber stehenblieben und keins das andere befriedigen könnte, sondern sie wird das absolute Recht behaupten, weil das Selbstbewußtsein die Negativität des Begriffs ist, die nicht nur für sich ist, sondern auch über ihr Gegenteil übergreift; und der Glaube selbst, weil er Bewußtsein ist, wird ihr ihr Recht nicht verweigern können.
Conversaciones en Valencia
[2.f. Polémica de la Ilustración contra la fe, la Ilustración por encima de la fe, dialéctica de la Ilustración; en qué consiste la realización de la intelección pura]
[563]1Epígrafe: 2.f. Polémica de la Ilustración contra la fe, la Ilustración por encima de la fe, dialéctica de la Ilustración; en qué consiste la realización de la intelección pura. La fe tiene el derecho divino, tiene el derecho de la absoluta igualdad consigo misma, o del puro pensamiento, tiene ese derecho, digo, contra la Ilustración, y lo que experimenta de ella [es decir, lo que obtiene de ella [666] o recibe de ella] es pura injusticia; pues la Ilustración retuerce a la fe, o le da la vuelta a la fe en todos los momentos de la fe, y los convierte en algo distinto de lo que esos momentos son en la fe. — Y a ella [a la Ilustración], empero, sólo le asiste un derecho humano contra la fe y a favor de la verdad de ella [a favor de la verdad de la Ilustración]; pues el no-derecho en el que la Ilustración incurre [la injusticia que la Ilustración comete] es el derecho de la desigualdad, y consiste en el dar la vuelta a las cosas, ponerlas del revés y mudarlas, un derecho que pertenece a la naturaleza de la autoconciencia por contraposición con la esencia simple [o con el ser simple] y con el pensamiento [con la pura idealidad, con el puro cogitatum]. Pero en cuanto el derecho de la Ilustración es el derecho de la autoconciencia, la Ilustración no sólo habrá de mantener también ese su derecho [es decir, no se va a tratar sólo de ese «también»], de suerte que, por tanto, hubiesen de quedar uno frente a otro dos iguales derechos del espíritu [el de la fe y el de la Ilustración], y ninguno de ellos pudiese satisfacer al otro [sucumbiendo a él], sino que la Ilustración habrá de afirmar y hacer valer un derecho absoluto [la negatividad que representa el concepto], porque la autoconciencia es la negatividad del concepto, la cual no solamente es para-sí, sino que se extiende también sobre lo contrario de esa negatividad y lo abarca, y la fe misma, precisamente porque la fe es conciencia [porque también ella es en definitiva negatividad], no podrá negar a la Ilustración ese su derecho [o no podrá rehusar a la negatividad ese derecho de la negatividad].
Conversaciones en Madrid
[563] La fe tiene, frente a la Ilustración, el Derecho divino, el derecho de la absoluta seipseigualdad o del pensar puro, y lo que experimenta de la Ilustración es sólo injusticia; pues ésta tergiversa la fe en todos sus momentos, y hace de ellos algo distinto de lo que son en ella. La Ilustración, sin embargo, únicamente tiene el Derecho humano contra la fe, y a favor de su verdad; pues la injusticia que comete es el derecho de la desigualdad, y consiste en invertir y transformar, derecho que pertenece a la naturaleza de la autoconciencia en oposición a la esencia simple o al pensar. Pero, al ser su Derecho el Derecho de [661] la autoconciencia, ella no sólo conservará también su Derecho, de modo que dos derechos iguales del espíritu permanezcan enfrentados mutuamente sin que uno pueda satisfacer al otro, sino que afirmará el Derecho absoluto, por que la autoconciencia es la negatividad del concepto, la cual no sólo es para sí, sino que, también, invade su contrario; y la fe misma, por ser conciencia, no podrá negarle a ella su derecho.
Conversations in Washington
[563] [563]2We kept the numeration given by the editor in the printed edition Faith has the divine right of absolute self-equality, or of pure thinking, against the Enlightenment, and it suffers quite a wrong from the Enlightenment, for the Enlightenment distorts faith in all its moments and [328] makes those moments into something quite different from what they are within faith. However, the Enlightenment has only a human right against faith and for its own truth, for the wrong it commits is the right of inequality, and it consists in inverting and altering a right that belongs to the nature of self-consciousness in regard to the simple essence, or to thinking. However, while the Enlightenment’s right is the right of self-consciousness, it will not only also retain its own right, so that two equal rights of spirit would be left facing off against each other with neither of them satisfying the claims of the other, but rather it will also assert absolute right because self-consciousness is the negativity of the concept, which is not only for itself but also overlaps with its opposite, and faith itself, because it is consciousness, will not be able to deny the Enlightenment its right.