Gespräche in der Dämmerung 00503
Parte de:
C. (BB) El espíritu [C. (BB) Der Geist] / Capítulo VI: El espíritu [VI. Der Geist] / B. El espíritu extrañado de sí; la formación o Bildung [B. Der sich entfremdete Geist. Die Bildung] / I. El mundo del espíritu extrañado de sí mismo [I. Die Welt des sich entfremdeten Geistes] / a. La formación (Bildung) y su reino de la realidad (o la Bildung y su reino de realidad frente al más-allá ideal) [a. Die Bildung und ihr Reich der Wirklichkeit]
[Lo bueno y lo malo considerados en su reflexión eh sí; el poder del Estado y la conciencia noble y la vil; la muerte como lo «contrario irreconciliado»]
Tabla de contenidos
Gespräche in Jena
[503] Durch diese Bewegung wird das Allgemeine mit dem Dasein überhaupt zusammengeschlossen, wie das daseiende Bewußtsein durch diese Entäußerung sich zur Wesentlichkeit bildet. Wessen dieses im Dienste sich entfremdet, ist sein in das Dasein versenktes Bewußtsein; das sich entfremdete [373] Sein ist aber das Ansich; es bekommt also durch diese Bildung Achtung vor sich selbst und bei den anderen. – Die Staatsmacht aber, die nur erst das gedachte Allgemeine, das Ansich war, wird durch eben diese Bewegung zum seienden Allgemeinen, zur wirklichen Macht. Sie ist diese nur in dem wirklichen Gehorsam, welchen sie durch das Urteil des Selbstbewußtseins, daß sie das Wesen ist, und durch die freie Aufopferung desselben erlangt. Dieses Tun, das das Wesen mit dem Selbst zusammenschließt, bringt die gedoppelte Wirklichkeit hervor, sich als das, welches wahre Wirklichkeit hat, und die Staatsmacht als das Wahre, welches gilt.
Conversaciones en Valencia
[503] Mediante este movimiento, lo universal queda puesto en contacto con la existencia en general, al igual que la conciencia existente [es decir, la conciencia desde su inmediato estar ahí] se forma y pule cobrando esencialidad y dándose esencialidad [Wesentlichkeit]. Pues aquello de lo que esa conciencia se extraña en el servicio, no es sino precisamente esa conciencia hundida en la existencia [en la inmediatez]; pero el ser [Seyn] extrañado de sí mismo [en ese extrañarse la conciencia] es el en-sí [es decir, es la inmediatez extrañada, es lo universal]; por tanto, la conciencia cobra mediante esta formación respeto ante sí misma [cobra universalidad] y se gana el respeto de los demás. —Y entonces resulta que el poder del Estado que de entrada sólo era un universal pensado, sólo era lo en-sí, se convierte en el universal que está ahí, o en lo universal estando ahí, es decir, se convierte en poder real [lo que sólo era un en-sí se vuelve real]. El poder del Estado sólo es tal poder real en la obediencia real, que el poder del Estado alcanza o consigue mediante el juicio de la autoconciencia de que el poder del Estado es la esencia, y [el poder del Estado sólo es tal poder real] a través del libre sacrificio de esa autoconciencia. Este hacer que une, vincula o articula la esencia con el self, produce la doble realidad [o suscita una doble realidad], a sí mismo [a ese hacer mismo] como aquello que tiene verdadera realidad, y al poder del Estado como lo verdadero que rige y que vale.
Conversaciones en Madrid
[503] Por este movimiento es como lo universal se conecta con la existencia en general, igual que la conciencia existente se forma culturalmente por este despojarse y alienarse X133X1[Entäußerung] Entäusserung. Aquí, «exteriorización» no dice nada; «despojamiento» solo no se entiende bien. Añadimos, por eso «alienarse», que es uno de los significados posibles de Entäusserung. En los escritos anteriores a la Fenomenología, Hegel utilizaba Entäusserung y Entfremdung como sinónimos; en este pasaje concreto parece hacerlo todavía, aunque en todo el libro en general, y en este capítulo, la distinción ya está funcionando. que la lleva hacia la condición de esencial. Aquello respecto a lo que esta conciencia se hace extraña en el servicio es su propia conciencia hundida en la existencia; pero el ser extrañado de sí es lo en-sí; recibe, entonces, por este proceso de formación cultural, el respeto ante sí mismo y entre los otros. Mas el poder estatal, que de primeras no era más que lo universal pensado, lo en-sí, justo por este movimiento deviene universal que es, poder efectivamente real. Lo es sólo en la obediencia efectiva que alcanza por medio del juicio de la autoconciencia —que dice que él es la esencia—, y por el libre sacrificio de ésta. Esta actividad que conecta la esencia con el sí-mismo produce esta doble realidad efectiva: a sí mismo como aquello que tiene realidad efectiva verdadera, y al poder estatal como lo verdadero, lo que vale.
Algunas aclaraciones
X133X = [Entäußerung] Entäusserung. Aquí, «exteriorización» no dice nada; «despojamiento» solo no se entiende bien. Añadimos, por eso «alienarse», que es uno de los significados posibles de Entäusserung. En los escritos anteriores a la Fenomenología, Hegel utilizaba Entäusserung y Entfremdung como sinónimos; en este pasaje concreto parece hacerlo todavía, aunque en todo el libro en general, y en este capítulo, la distinción ya está funcionando.
Conversations in Washington
[503] [503]2We kept the numeration given by the editor in the printed edition Through this movement, the universal becomes merged with existence itself just as existing consciousness culturally forms itself into essentiality through this self-relinquishing. That from which this consciousness alienates itself in its service is its own consciousness which is itself sunken into existence; however, self-alienated being is the in-itself. Through this cultural formation, it acquires a respect for itself and a respect from others. – However, state-power, which was initially only the universal in thought,3das gedachte Allgemeine that is, the in-itself, now becomes through this very movement the existing universal; it becomes actual power. It is this existing universal and actual power only in the actual obedience that it achieves through [293] the judgment of self-consciousness, which judges that this actual power is the essence, and attains the essence through the free sacrifice of this self-consciousness to the actual power. This doing, which merges the essence with the self, engenders the doubled actuality, namely, the self as what has true actuality and state-power as the true that is validly in force.