Gespräche in der Dämmerung 00431
Parte de:
C. (AA.) Razón [C. (AA.) Vernunft] / V: Certeza y verdad de la razón [V. Gewißheit und Wahrheit der Vernunft] / C. La individualidad que se es real en y para sí misma [C. Die Individualität, welche sich an und für sich selbst reell ist] / c. La razón comprobadora de leyes, o la razón que examina y comprueba leyes [c. Gesetzprüfende Vernunft]
[La sustancia simple se nos revela a nosotros como universalidad formal (la cosa misma); para la conciencia en este momento de su devenir, no se trata de que esa universalidad formal y esa conciencia pura no sean sino la cosa misma, sino que esa conciencia por de pronto consiste en quedar ese universal frente al momento de contenido; la conciencia se ha convertido en conciencia comprobadora de la universalizabilidad de máximas, en el sentido de Kant]
Tabla de contenidos
Gespräche in Jena
[431] In den beiden soeben betrachteten Momenten der Erfüllung des vorher leeren geistigen Wesens hat sich das Setzen von unmittelbaren Bestimmtheiten an der sittlichen Substanz und dann das Wissen von ihnen, ob sie Gesetze sind, aufgehoben. Das Resultat scheint hiermit dieses zu sein, daß weder bestimmte Gesetze noch ein Wissen derselben stattfinden könne. Allein die Substanz ist das Bewußtsein von sich als der absoluten Wesenheit, welches hiermit weder den Unterschied an ihr noch das Wissen von ihm aufgeben kann. Daß das Gesetzgeben und Gesetzprüfen sich als nichtig erwies, hat diese Bedeutung, daß beides, einzeln und isoliert genommen, nur haltungslose Momente des sittlichen Bewußtseins sind; und die Bewegung, in welcher sie auftreten, hat den formalen Sinn, daß die sittliche Substanz sich dadurch als Bewußtsein darstellt.
Conversaciones en Valencia
[431] En los dos momentos que acabamos de considerar [es decir, el de dar y el de comprobar leyes] X287X1En lo que sigue, se va a referir, por tanto, también a los ejemplos discutidos en el cap. V, C, b. con los que se trataba de dar contenido a la sustancia espiritual antes vacía, el poner determinidades inmediatas en la sustancia ética y después el saber de ellas en lo que respecta a si pueden ser consideradas leyes o no, ha quedado suprimido y superado. El resultado parece ser, pues, que aquí no puede haber ni leyes determinadas ni tampoco un saber de ellas. Sólo la sustancia es la conciencia de sí como esencialidad absoluta X288X2La conciencia del imperativo quiere ser, como hemos visto, conciencia de una esencialidad absoluta; pero resulta que no hay otra cosa que sea conciencia de sí como esencialidad absoluta que la sustancia misma. y, por tanto, ni puede suministrar una diferencia en ella ni tampoco un saber acerca de esa diferencia X289X.3Ésta es, pues, la moraleja del presente cap. V, C, c. El que el dar leyes y el examinar y comprobar leyes se revelen en última instancia como inconsistentes y nulos, tiene el significado de que tanto lo uno como lo otro, cuando se los toma sueltos [einzeln] y se los toma aislados [isolirt], sólo son momentos de la sustancia ética que, tomados de esa forma, se quedan sin base y sin sostén; y el movimiento en el que aparecen tiene el sentido formal de que esos momentos son la sustancia ética que a través de ellos se expone como conciencia.
Algunas aclaraciones
X287X = En lo que sigue, se va a referir, por tanto, también a los ejemplos discutidos en el cap. V, C, b.
X288X = La conciencia del imperativo quiere ser, como hemos visto, conciencia de una esencialidad absoluta; pero resulta que no hay otra cosa que sea conciencia de sí como esencialidad absoluta que la sustancia misma.
X289X = Ésta es, pues, la moraleja del presente cap. V, C, c.
Conversaciones en Madrid
[431] En los dos momentos recién considerados, en los que se colmaba la esencia espiritual previamente vacía, se cancelaba, primero el poner determinidades inmediatas en la substancia ética, y luego, el saber acerca de ellas si son leyes o no. Con lo que el resultado parece ser éste: que ni las leyes determinadas ni un saber acerca de las mismas pueden tener lugar. Mas la substancia es la conciencia de sí en cuanto esencialidad absoluta, conciencia que, por tanto, no puede abandonar ni la diferencia que hay en en ella, ni el saber acerca de esta diferencia. El que la práctica de legislar y la de examinar las leyes hayan mostrado su nulidad tiene este significado: que ambas, tomadas singular y aisladamente, son sólo momentos de la conciencia ética que no se sostienen, inconsistentes; y el movimiento con el que entran en escena tiene el sentido formal de que, por él, la substancia ética se presenta como conciencia.
Conversations in Washington
[431] [431]4We kept the numeration given by the editor in the printed edition In both of the moments which were just now under examination, namely, the moments of the fulfillment of the previously empty spiritual essence, there were the positing of immediate determinatenesses in ethical substance and then the knowing of whether those determinatenesses are laws; both of them have now been sublated. What seems to be the result is that neither determinate laws nor a knowing of these determinate laws is able to transpire. Yet substance is the consciousness of itself as absolute essentiality, a consciousness which can therefore neither relinquish the difference in the substance nor relinquish the knowing of this difference. That both law-giving and law-testing have shown themselves to be null and void means that both, when taken individually and in isolation, are only moments of the ethical consciousness which never ceases to be in movement; and the movement in which they come on the scene has the formal sense that the ethical substance as a result presents itself as consciousness.
Conversaciones en el Atrium
EN CONSTRVCCION
EN CONSTRVCCION
OFFICĪNA PHILOSOPHŌRVM ***