Gespräche in der Dämmerung 00405

Parte de:

C. (AA.) Razón [C. (AA.) Vernunft] / V: Certeza y verdad de la razón [V. Gewißheit und Wahrheit der Vernunft] / C. La individualidad que se es real en y para sí misma [C. Die Individualität, welche sich an und für sich selbst reell ist] / a. El reino animal del espíritu y el engaño, o también: la cosa misma [a. Das geistige Tierreich und der Betrug oder die Sache selbst]

 

[La contraposición entre el hacer y el ser; o entre concepto y realidad, ahora como resultado]

Gespräche in Jena

[405] Es entsteht dem Bewußtsein also in seinem Werke der Gegensatz des Tuns und des Seins, welcher in den früheren Gestalten des Bewußtseins zugleich der Anfang des Tuns war, hier nur Resultat ist. Er hat aber in der Tat gleichfalls zugrunde gelegen, indem das Bewußtsein als an sich reale Individualität ans Handeln ging; denn dem Handeln war die bestimmte ursprüngliche Natur als das Ansich vorausgesetzt, und das reine Vollbringen um des Vollbringens willen hatte sie zum Inhalte. Das reine Tun ist aber die sich selbst gleiche Form, welcher hiermit die Bestimmtheit der ursprünglichen Natur ungleich ist. Es ist hier wie sonst gleichgültig, welches von beiden Begriff und welches Realität genannt wird; die ursprüngliche Natur ist das Gedachte oder das Ansich gegen das Tun, worin sie erst ihre Realität [301] hat; oder die ursprüngliche Natur ist das Sein ebensowohl der Individualität als solcher wie ihrer als Werk, das Tun aber ist der ursprüngliche Begriff als absoluter Übergang oder als das Werden. Diese Unangemessenheit des Begriffs und der Realität, die in seinem Wesen liegt, erfährt das Bewußtsein in seinem Werke; in diesem wird es sich also, wie es in Wahrheit ist, und sein leerer Begriff von sich selbst verschwindet.

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Conversaciones en Valencia

[La contraposición entre el hacer y el ser; o entre concepto y realidad, ahora como resultado]

[405]1Epígrafe: La contraposición entre el hacer y el ser; o entre concepto y realidad, ahora como resultado. A la conciencia le surge, pues, en su obra la contraposición entre el hacer y el ser, la cual contraposición en las figuras anteriores de la conciencia era a la vez principio o inicio del hacer, y aquí es sólo resultado [es lo que acabamos de ver]. Pero, en realidad, esa contraposición quedaba ya igualmente puesta [más arriba] por base, cuando la conciencia, como individualidad en sí real, iba a la acción [pasaba a la acción]; pues a la acción se le pre-suponía [a la acción le quedaba por delante, a la acción le precedía] la determinada naturaleza inicial en cuanto en-sí, y el puro ejecutar por mor del ejecutar mismo [el puro hacer por hacer, el puro llevar adelante por llevar adelante] tenía a esa naturaleza por contenido. Ahora bien, el puro hacer es la forma igual a sí misma a la que, por tanto, le es desigual la determinidad de la naturaleza inicial. Y aquí, como en cualquier otra parte, es indiferente a cuál de las dos se la llama concepto y a cuál de las dos [si a la naturaleza original o si a la acción] se la llama realidad. La naturaleza original es lo pensado o el en-sí [concepto] respecto al hacer en el que ella empieza teniendo realidad [realidad]; o también: la naturaleza original es el ser [realidad] tanto de la individualidad como tal, como de ella como ergon u obra [es decir, como de la individualidad como ergon u obra], y el hacer, a su vez, es el concepto original [concepto] como tránsito absoluto, o como devenir [como la intención, pensamiento o concepto mediante el que se pone por obra lo que se va a hacer, y al que lo que se va a hacer ha de ajustarse]. De esta inadecuación de concepto y realidad que radica en su esencia [en la esencia de la conciencia] hace experiencia la conciencia en su obra; en ésta, en la obra, se vuelve, pues, la conciencia como de verdad ella es, y su vacío concepto desaparece de ella [es decir, el vacío concepto de la conciencia desaparece de ésta, se esfuma en ella la vacuidad de su propio concepto].

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Conversaciones en Madrid

[405] Así que a la conciencia se le origina en su obra la oposición entre el hacer y el ser, oposición que, en las figuras anteriores de la conciencia, era a la vez, el comienzo de la actividad, y aquí sólo es resultado. Pero, de hecho, esta oposición estaba subyacente, en tanto que la conciencia se dirigía a la acción como individualidad real en sí; pues a la acción se le presuponía la naturaleza primigenia determinada en cuanto lo en-sí, y el puro dar cumplimento por el cumplimiento mismo es lo que esa naturaleza tenía por contenido. Pero la actividad pura es la forma igual a sí misma, la cual, por ende, es desigual con la determinidad de la naturaleza primigenia. Aquí, como en los demás sitios, es indiferente cuál de ambos se denomina concepto, y cuál realidad; la naturaleza primigenia es lo pensado o lo en frente a la actividad en la que ella sola y primeramente tiene su realidad; o bien, la naturaleza primigenia es el ser tanto de la individualidad en [489] cuanto tal como de ella en cuanto obra, mientras que la actividad es el concepto primigenio, en cuanto pasaje absoluto, o en cuanto el devenir. Esta inadecuación del concepto y de la realidad que reside en su esencia la experimenta y aprende la conciencia en su obra; es en ésta, pues, donde ella llega a serse tal como es en verdad, y donde su concepto vacío se desvanece por sí mismo.

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Conversations in Washington

[405] [405]2We kept the numeration given by the editor in the printed edition To consciousness, in its work the opposition of being and doing emerges, an opposition which in the earlier shapes of consciousness was at once the beginning of action but which is here only a result. However, that opposition has in fact likewise been established as the basis by consciousness as individuality setting itself to action as real in itself. This is so because the determinate original nature as the in-itself was presupposed for action, and the original nature’s content was pure achievement for the sake of achievement. However, the pure doing is the self-equal form which is thereby not equal to the determinateness of the original nature. Here, as is usual, it is a matter of indifference which of the two is called concept and which is called reality. The original nature is what has been thought, or it is the in-itself confronting the doing within which that original nature initially has its reality; or the original nature is the being both of individuality as such individuality and of individuality as its work. However, the doing is the original concept as absolute transition, or as becoming. In its work, consciousness learns from its own experience about this inadequation3Unangemessenheit4 of concept and reality that lies in the essence of consciousness. Therefore, it is in its work that, to itself, consciousness comes to be as it is in truth, and its empty concept of itself vanishes.

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Conversaciones en el Atrium

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