Gespräche in der Dämmerung 00345

Parte de:

C. (AA.) Razón [C. (AA.) Vernunft] / V: Certeza y verdad de la razón [V. Gewißheit und Wahrheit der Vernunft] / A. La razón observadora [A. Beobachtende Vernunft] / c. Observación de la relación de la autoconciencia con su realidad inmediata; fisiognómica y teoría del cráneo [c. Beobachtung der Beziehung des Selbstbewußtseins auf seine unmittelbare Wirklichkeit; Physiognomik und Schädellehre]

 

[El significado negativo]

Gespräche in Jena

[345] Die andere Bedeutung des Resultats ist die schon betrachtete des begrifflosen Beobachtens. Dieses weiß sich nicht anders zu fassen und auszusprechen, als daß es unbefangen den Knochen, wie er sich als sinnliches Ding findet, das seine Gegenständlichkeit für das Bewußtsein nicht zugleich verliert, für die Wirklichkeit des Selbstbewußtseins aussagt. Es hat aber auch darüber, daß es dies sagt, keine Klarheit des Bewußtseins und faßt seinen Satz nicht in der Bestimmtheit seines Subjekts und Prädikats und der Beziehung derselben, noch weniger in dem Sinne des unendlichen, sich selbst auflösenden Urteils und des Begriffs. – Es verbirgt sich vielmehr aus einem tiefer liegenden Selbstbewußtsein des Geistes, das hier als eine natürliche Honettetät erscheint, die Schmählichkeit des begrifflosen nackten Gedankens, für die Wirklichkeit des Selbstbewußtseins einen Knochen zu nehmen, und übertüncht ihn durch die Gedankenlosigkeit selbst, mancherlei Verhältnisse von Ursache und Wirkung, von Zeichen, Organ usw., die hier keinen Sinn haben, einzumischen und durch Unterscheidungen, die von ihnen hergenommen sind, das Grelle des Satzes zu verstecken.

Siguiente párrafo

Párrafo anterior

Ir al índice

Conversaciones en Valencia

[El significado negativo]

[345]1Epígrafe: El significado negativo. El segundo significado del resultado es el ya considerado de la falta de concepto que aqueja a la observación. Ésta no sabe entenderse de otra forma ni articularse de otra manera ni tampoco expresarse de otro modo que declarando con toda tranquilidad como realidad de la autoconciencia el hueso, tal como este hueso se encuentra y está ahí como cosa sensible, que no pierde a la vez [pese a no ser sino la realidad de la autoconciencia] su objetualidad para la conciencia. Pero ese observar carente de concepto ni siquiera tiene claridad de conciencia acerca de que lo que está diciendo es precisamente eso [que la realidad de la autoconciencia es un hueso] y, por tanto, ni articula ni comprende ese su enunciado mediante la neta determinidad de un sujeto y de un predicado y de la relación entre ambos X185X,2 ni mucho menos en el sentido de un juicio infinito que se disuelva a sí mismo, ni tampoco del concepto [es decir, mediante la determinidad del concepto, esto es, de no estar siendo ella sino sino eso otro que radicalmente no es ella, un hueso]. — Sino que sucede más bien que en virtud, por decirlo así, de una profunda autoconciencia del espíritu [en virtud de un profundo ser consciente de sí el espíritu], que aquí semeja como una especie de pudor natural, ese observar [esa observación] oculta el mal gusto de esa su desnuda idea carente de concepto, que consiste en tomar un hueso por la realidad de la autoconciencia, y trata de blanquearla o encubrirla mediante esa otra falta o ausencia de pensamiento que consiste en traer a colación todo un tropel de relaciones causa-efecto, de signos, de órganos, etc., que aquí no tienen sentido ninguno, y de tapar mediante distinciones que están tomadas de esos elementos, de ocultar, digo, lo demasiado claro y fuerte que resulta ese enunciado.

Algunas aclaraciones

X185X = Si lo comprendiera, entendería que la conciencia es precisamente el concepto de eso, de eso absolutamente otro.

Siguiente párrafo

Párrafo anterior

Ir al índice

Conversaciones en Madrid

[345] El otro significado del resultado es el que ya hemos examinado, el del observar sin concepto. Este observar no sabe captarse y enunciarse de otro modo que declarando sin complejos que la realidad efectiva de la autoconciencia es el hueso tal como se lo encuentra, como cosa sensible que no pierde a la vez su objetualidad para la conciencia. Pero, aparte de decir esto, no tiene ninguna claridad de conciencia, y no capta su proposición en la determinidad de su sujeto y predicado y de la referencia entre ambos, menos aún en el sentido del juicio infinito que se autodisuelve, ni del concepto. Antes bien, por una autoconciencia del espíritu situada a un nivel más profundo, y que aquí aparece como un estado de pudor natural, se oculta la ignominia de ese pensamiento sin concepto que consiste en tomar un hueso por la realidad efectiva de la autoconciencia, y luego lo repinta con la falta de pensamiento misma que entremezcla algunas relaciones de causa y efecto, de signos, órganos, etc., que no tienen aquí ningún sentido, y con diferenciaciones que se toman de aquéllas para esconder el chirrido de esa proposición.

Siguiente párrafo

Párrafo anterior

Ir al índice

Conversations in Washington

[345] [345]3We kept the numeration given by the editor in the printed edition The other meaning of the result is the one already considered, that of observation without concepts. This does not know any other way to grasp itself and express itself other than by naively declaring that the bone, as it is to be found as a sensuous thing which does not lose its determinateness as an objectivity for consciousness, is the actuality of self-consciousness. However, it also has no clear consciousness about what it is saying in this proposition, and it grasps neither the determinateness of the subject and predicate, nor their relation to each other. Even less does it grasp the proposition in the sense of an infinitely dissolving judgment and of the concept. – From out of a kind of natural honesty which lies at a deeper level of self-conscious spirit, it instead conceals from itself the ignominiousness of brute, conceptless thought which takes a bone to be the actuality of self-consciousness. It then whitewashes that thought by means of an unthinking mixture of all sorts of relations between cause and effect, between sign and organ, etc., relations which make no sense here, and by then relying on distinctions derived from that senseless mixture, it conceals just how tawdry the proposition really is.

Siguiente párrafo

Párrafo anterior

Ir al índice

Conversaciones en el Atrium

EN CONSTRVCCION

EN CONSTRVCCION

Siguiente párrafo

Párrafo anterior

Ir al índice

Sidebar



error: Content is protected !!