Gespräche in der Dämmerung 00621
Parte de:
C. (BB) El espíritu [C. (BB) Der Geist] / VI: El espíritu [VI. Der Geist] / C. El espíritu seguro de sí mismo. La moralidad [C. Der seiner selbst gewisse Geist. Die Moralität] / b. El trastrueque, o todo cambiado de sitio [b. Die Verstellung]
[En resumen]
Tabla de contenidos
Gespräche in Jena
[621] Stellen wir diese Momente, durch die das Bewußtsein sich in seinem moralischen Vorstellen fortwälzte, zusammen, so erhellt, daß es jedes wieder in seinem Gegenteile aufhebt. Es geht davon aus, daß für es die Moralität und Wirklichkeit nicht harmoniere, aber es ist ihm damit nicht Ernst, denn in der Handlung ist für es die Gegenwart dieser Harmonie. Es ist ihm aber auch mit diesem Handeln, da es etwas Einzelnes ist, nicht Ernst; denn es hat einen so hohen Zweck, das höchste Gut. Dies ist aber wieder nur eine Verstellung der Sache, denn darin fiele alles Handeln und alle Moralität hinweg. Oder es ist ihm eigentlich mit dem moralischen Handeln nicht Ernst, sondern das Wünschenswerteste, Absolute ist, daß das höchste Gut ausgeführt und das moralische Handeln überflüssig wäre. [456]
Conversaciones en Valencia
[En resumen]
[621]1Epígrafe: En resumen. Si repasamos poniéndolos juntos los momentos por los que la conciencia ha ido avanzando lentamente [y en los que se ve enredada], al representarse moralmente las cosas, entonces se ve claro que la conciencia moral suprime y supera otra vez cada uno de ellos en lo contrario. La conciencia moral parte de que para ella no hay armonía entre la moralidad y la realidad, pero no se toma en serio tal cosa, pues en la acción se da para ella la actualidad o presencia de esa armonía [ella tiene por actual y presente esa armonía, ella tiene por cosa hecha esa armonía]. Pero tampoco puede tomarse [la conciencia] en serio esa acción, ya que la acción es algo particular [einzeln]; y la conciencia, en cambio, tiene un fin demasiado alto, el bien supremo. Pero esto no es otra vez sino un trastocar las cosas, pues con ello [es decir, con ese no tomarse la acción en serio] se vendría abajo y desaparecería toda acción moral y toda moralidad. O resulta que propiamente la conciencia no se está tomando en serio la acción moral, sino que lo más deseable de todo, lo absoluto, es que el bien supremo se realice y que la acción moral resulte superflua.
Conversaciones en Madrid
[621] Si ahora juntamos estos momentos por los que la conciencia avanzaba lentamente dentro de su representación moral, se hace patente que ella, a su vez, cancela a cada uno en su contrario. La conciencia parte de que, para ella, la moralidad no armoniza con la realidad efectiva, pero no se lo toma en serio, pues, para ella, es dentro de la acción donde tiene presencia esa armonía. Pero tampoco se toma en serio este actuar, ya que es algo singular; pues, ella, la conciencia, tiene un fin tan alto como el sumo bien. Pero esto, de nuevo, no es más que un disimular la Cosa desplazándola, pues aquí quedan eliminados todo actuar y toda moralidad. O bien: la conciencia, propiamente, no se toma en serio el actuar moral, sino que lo más deseable, y absoluto, sería que se llevara a cabo el sumo bien y que la acción moral fuera superflua.
Conversations in Washington
[621] [621]2We kept the numeration given by the editor in the printed edition If we collect these moments together in which consciousness has rolled forward in its morally representational thinking,3Vorstellen it becomes clear that it again sublates each of those representational thinkings into its opposite. It starts from the position that for it morality and actuality do not harmonize, but, to itself, it is not serious about it, for in the action this harmony is for it in the present. However, to itself, it is also not serious about this action, for it is something singular, for it has such a lofty purpose, the highest good. But this is again only a dissemblance about what is really at issue, for in that dissemblance all action and all morality would fall by the wayside. Or, it is that, to itself, it is not genuinely serious about moral action, but rather it holds that what is most desirable, the absolute, is that the highest good be put into practice and that moral action be superfluous.
Conversaciones en el Atrium
EN CONSTRVCCION
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