Gespräche in der Dämmerung 00530
Parte de:
C. (BB) El Espíritu [C. (BB). Der Geist] / Capítulo VI: El espíritu [VI. Der Geist] / B. El espíritu extrañado de sí; la formación o Bildung [B. Der sich entfremdete Geist. Die Bildung] / I. El mundo del espíritu extrañado de sí mismo [I. Die Welt des sich entfremdeten Geistes] / b. La fe y la intelección pura [b. Der Glaube und die reine Einsicht]
[La fe considerada en y de por sí, la Trinidad]
Tabla de contenidos
Gespräche in Jena
[530] Die Seite des Anundfürsichseins im glaubenden Bewußtsein ist sein absoluter Gegenstand, dessen Inhalt und Bestimmung sich ergeben hat. Denn er ist nach dem Begriffe des Glaubens nichts anderes als die in die Allgemeinheit des reinen Bewußtseins erhobene reale Welt. Die Gliederung der letzteren macht daher auch die Organisation der ersteren aus, nur daß die Teile in dieser in ihrer Begeistung sich nicht entfremden, sondern an und für sich seiende Wesen, in sich zurückgekehrte und bei sich selbst bleibende Geister sind. Die Bewegung ihres Übergehens ist daher nur für uns eine Entfremdung der Bestimmtheit, in der sie in ihrem Unterschiede sind, und nur für uns eine notwendige Reihe; für den Glauben aber ist ihr Unterschied eine ruhige Verschiedenheit und ihre Bewegung ein Geschehen.
Conversaciones en Valencia
[La fe considerada en y de por sí, la Trinidad]
[530]1Epígrafe: La fe considerada en y de por sí, la Trinidad. El lado del ser en y para sí en la conciencia creyente [es decir, el primero de los lados que acabamos de distinguir] es su objeto absoluto [el objeto absoluto de esa conciencia], cuyo contenido y determinación hemos obtenido ya. Pues, conforme al concepto de la fe, ese objeto no es otra cosa que el mundo real elevado a la universalidad de la conciencia pura. Por tanto, la articulación del mundo real es la que constituye también la organización del mundo real elevado a la universalidad de la conciencia pura, sólo que las partes en éste no se extrañan ya al quedar «espiritizadas» o sublimadas [begeistet], sino que son seres que son en y para sí, espíritus retornados a sí que permanecen junto a sí mismos. — Sólo para nosotros, por tanto, es el movimiento de su pasar esos seres de unos a otros un extrañamiento de la determinidad en la que ellos están en su diferencia [es decir, en la determinidad en la que ellos consisten en cuanto diferentes], y sólo para nosotros es o constituirá ese movimiento una serie [o secuencia] necesaria; en cambio, para la fe, la diferencia de ellos no es sino una quiescente diversidad [una diversidad quieta] y [para la conciencia, no para nosotros] es acontecer, es decir, una historia [algo que ellos hacen o que a ellos les pasa, no un trocarse ellos en su contrario]. [De nuevo las referencias van a ser al dogma trinitario.]
Conversaciones en Madrid
[530] El lado del ser en y para sí en el seno de la conciencia creyente es su objeto absoluto, cuyo contenido y determinación ya se nos ha dado. Pues tal objeto, conforme al concepto de la fe, no es otra cosa que el mundo real elevado a la universalidad de la conciencia pura. Por eso, la articulación de este último constituye también la organización del primero, sólo que, en éste, las partes no se hacen extrañas a sí en su espiritualización, sino que son, en y para sí, esencias que son, espíritus retornados dentro de sí y que permanecen cabe sí mismos. — Por eso, el movimiento de su pasar es sólo para nosotros un extrañamiento de la determinidad en la que están en su diferencia, y sólo para nosotros es una serie necesaria; mientras que, para la fe, su diferencia es una diversidad quieta, y su movimiento es un acontecer.
Conversations in Washington
[530] [530]2We kept the numeration given by the editor in the printed edition The aspect of being-in-and-for-itself within the faithful consciousness is its absolute object, or the object whose content and determination have according to the concept of faith already resulted. This is so because the object is itself nothing but the real world elevated into the universality of pure consciousness. The articulation of the latter, the real world, thus constitutes the organization of the world of faith, except that within the latter essence, the parts do not alienate themselves within their spiritualization.3Begeistung Rather, they are essences existing in and for themselves, enduring spirits, and have returned into themselves and are at one with themselves in their own sphere.4bei sich selbst – It is thus only for us that the movement of their transition is an alienation of the determinateness in which they are in their differences, and it is only for us that it is a necessary series. However, for faith, their difference is a motionless diversity, and their movement is an event.