Gespräche in der Dämmerung 00251
Parte de:
C. (AA.) Razón [C. (AA.) Vernunft] / V: Certeza y verdad de la razón [V. Gewißheit und Wahrheit der Vernunft] / A. La razón observadora [A. Beobachtende Vernunft] / a. Observación de la naturaleza [a. Beobachtung der Natur]
[El experimento]
Tabla de contenidos
Gespräche in Jena
[251] Der Vernunftinstinkt dieses Bewußtseins geht, weil das Gesetz zugleich an sich Begriff ist, notwendig, aber ohne zu wissen, daß er dies will, selbst darauf, das Gesetz und seine Momente zum Begriffe zu reinigen. Er stellt Versuche über das Gesetz an. Wie das Gesetz zuerst erscheint, stellt es sich unrein, umhüllt von einzelnem sinnlichen Sein, [und] der Begriff, der seine Natur ausmacht, im empirischen Stoff versenkt dar. Der Vernunftinstinkt geht in seinen Versuchen darauf, zu finden, was unter diesen und jenen Umständen erfolge. Das Gesetz scheint hierdurch nur um so mehr in sinnliches Sein getaucht zu werden; allein dies geht darin vielmehr verloren. Diese Forschung hat die innere Bedeutung, reine Bedingungen des Gesetzes zu finden; was nichts anderes sagen will (wenn auch das Bewußtsein, das sich so ausdrückt, meinen sollte, es sage damit etwas anderes), als das Gesetz ganz in die Gestalt des Begriffes zu erheben und alle Gebundenheit seiner Momente an bestimmtes Sein zu tilgen. Die negative Elektrizität z.B., welche etwa zuerst als Harzelektrizität, so wie die positive als Glaselektrizität sich ankündigt, verliert durch die Versuche ganz diese Bedeutung und wird rein zur positiven und negativen Elektrizität, deren jede nicht einer besonderen Art von Dingen mehr angehört; und es hört auf, gesagt werden zu können, daß es Körper gibt, die positiv elektrisch, andere, die negativ elektrisch sind. So macht auch das Verhältnis von Säure und Base und deren Bewegung gegeneinander ein Gesetz aus, worin diese Gegensätze als Körper erscheinen. Allein diese abgesonderten Dinge haben keine Wirklichkeit; die Gewalt, [194] welche sie auseinanderreißt, kann sie nicht hindern, sogleich in einen Prozeß wieder einzutreten; denn sie sind nur diese Beziehung. Sie können nicht wie ein Zahn oder eine Klaue für sich bleiben und so aufgezeigt werden. Daß dies ihr Wesen ist, unmittelbar in ein neutrales Produkt überzugehen, macht ihr Sein zu einem an sich aufgehobenen oder zu einem allgemeinen, und Säure und Base haben Wahrheit nur als Allgemeine. Wie also Glas und Harz ebensowohl positiv als negativ elektrisch sein kann, so ist Säure und Base nicht als Eigenschaft an diese oder jene Wirklichkeit gebunden, sondern jedes Ding ist nur relativ sauer oder basisch; was dezidierte Base oder Säure zu sein scheint, erhält in den sogenannten Synsomatien die entgegengesetzte Bedeutung zu einem anderen. – Das Resultat der Versuche hebt auf diese Weise die Momente oder Begeistungen als Eigenschaften der bestimmten Dinge auf und befreit die Prädikate von ihren Subjekten. Diese Prädikate werden, wie sie in Wahrheit sind, nur als allgemeine gefunden; um dieser Selbständigkeit willen erhalten sie daher den Namen von Materien, welche weder Körper noch Eigenschaften sind, und man hütet sich wohl, Sauerstoff usf., positive und negative Elektrizität, Wärme usw. Körper zu nennen.
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[El experimento]
[251]1Epígrafe: El experimento. El instinto racional de esta conciencia, precisamente porque la ley es a la vez en sí concepto, se endereza (aunque sin saber ese instinto que él quiere tal cosa), se endereza, digo, necesariamente a purificar y transformar en concepto la ley y sus momentos [es decir, la ley y los momentos de la ley]. Ese instinto monta experimentos acerca de la ley. Tal como la ley empieza apareciendo o empieza mostrándose, se presenta ahí de forma impura, envuelta en ser sensible individual y contingente [einzeln], y el concepto que constituye la naturaleza de la ley aparece, por tanto, sumido y hundido en material empírico. El instinto de la razón se endereza en sus experimentos a encontrar qué es lo que propiamente está pasando bajo estas o aquellas circunstancias. La ley parece entonces quedar sumergida tanto más en el ser sensible; sólo que es precisamente en ello cuando más bien ese ser sensible se pierde. Pues esa investigación tiene el significado de encontrar puras condiciones de la ley o condiciones puras de la ley [es decir, las condiciones generales y puras, en virtud de las cuales la ley rige]; lo cual (aun cuando la conciencia que así se expresa pensase que con ello está diciendo otra cosa) no quiere decir sino elevar enteramente la ley a la forma o figura [Gestalt] del concepto [la forma de concepto], y eliminar toda vinculación de sus momentos [de los momentos de la ley] a ningún ser [Seyn] determinado, a ningún quedar nada determinadamente ahí. La electricidad negativa, por poner un ejemplo, que empieza anunciándose o apareciendo [o manifestándose] como electricidad resinosa [ligada a la resina], así como la positiva, que se anuncia o empieza anunciándose [dando señales de sí, manifestándose] como electricidad vítrea [ligada al vidrio], mediante tales experimentos pierden enteramente ese significado, y pasan a convertirse puramente en electricidad positiva o en electricidad negativa, dejando de pertenecer cada una de ellas a un tipo particular de cosas X49X;2Vide infra Algunas aclaraciones X49X. ya no se puede seguir diciendo que haya cuerpos que son positivamente eléctricos y otros que son negativamente eléctricos, que haya cuerpos que son eléctricos positivos y otros que son eléctricos negativos [pues la electricidad positiva y negativa no queda ligada a cuerpos determinados]. Así también, la relación entre ácido y base, y el movimiento del primero respecto a la segunda y de la segunda respecto al primero, constituye una ley en que esas contraposiciones [la de ácido y base] aparecen en cuanto cuerpos. Sólo que estas cosas, cuando se las considera separadas [o también: sólo que tales cosas, separadas unas de otras], no tienen ninguna realidad. El mismo poder [el del entendimiento] que las separa con tanta violencia no puede impedirles entrar enseguida otra vez en un proceso [de interacción entre ellas]; pues ellas no son sino esa relación. Son cosas que no pueden permanecer para sí [o de por sí], como un diente o una garra, ni tampoco se los puede mostrar así. El que su esencia sea transitar inmediatamente a un producto neutro es lo que convierte su ser [Seyn] en un ser en sí suprimido y superado, o en un ser universal, y ácido y base sólo tienen verdad como universales [no como ligados a cuerpos particulares, o a tal o a cual tipo de cuerpos]. Así como el vidrio y la resina pueden ser eléctricos tanto positiva como negativamente [es decir, pueden tener tanto electricidad positiva como negativa], así también ácido y base en cuanto propiedades no están ligadas a esta o aquella realidad, sino que cada cosa es sólo relativamente ácida o relativamente básica; y en las sinsomacias [Synsomatien] [es decir, en la formación de compuestos syn-somáticos, esto es, en la formación de compuestos resultantes de enlaces de sustancias homogéneas, o sea, de ácidos con ácidos y de bases con bases], en las «sinsomacias», digo, lo que decididamente parece ser una base o un ácido pasa a desempeñar en el comportamiento respecto al otro [respecto a la otra base o respecto al otro ácido] un papel contrapuesto [contrapuesto a aquel que se supone que había de tener como ácido o base] [es decir, se comportan respecto al otro de forma contraria a lo que se supone que son] X50X.3Vide infra Algunas aclaraciones X50X. — El resultado de los experimentos suprime y supera de esta forma los momentos o sublimaciones [Begeistungen, o abstracciones o «espiritizaciones»] en cuanto propiedades de las cosas determinadas o de cosas determinadas, con lo cual los predicados quedan liberados de sus sujetos. Estos predicados, tal como en verdad son, sólo se los encuentra o se los puede encontrar como universales [es decir, sólo se da con ellos o se puede dar con ellos como universales]. En virtud de esta autonomía reciben por eso el nombre de materias [Materien] X51X4Vide infra Algunas aclaraciones X51X. o elementos, que ni son cuerpos ni tampoco propiedades, y hay que cuidarse mucho de llamar cuerpos al oxígeno, a la electricidad positiva y negativa, al calor, etc.
Algunas aclaraciones
X49X
Fue el resultado teórico que Benjamin Franklin sacó de sus experimentos. Según W. Bonsiepen y R. Heede, la fuente directa de estas observaciones de Hegel es una versión alemana de 1758 de las cartas de Franklin sobre la electricidad publicadas en Londres en 1751 por Peter Collinson, un miembro de la Royal Society.
X50X
Siempre según Bonsiepen y Heede, en estas observaciones Hegel depende directamente de una versión alemana de 1804 de escritos latinos del químico húngaro J. J. Winterl. Éste estudió especialmente la relación entre fenómenos químicos y fenómenos eléctricos y fue el inspirador de H. Ch. Oersted, el descubridor de la identidad de naturaleza de los fenómenos eléctricos y los fenómenos magnéticos y de quien proviene la primera idea de una posible teoría unificada de los distintos tipos de campo en la ciencia física, que un siglo después haría suya A. Einstein.
X51X
Según Bonsiepen y Heede, Hegel depende aquí directamente de la Naturlehre de F. A. Gren, Halle, 1801. En la biblioteca de Hegel figuraba un ejemplar de ese libro. Como era corriente en la época (siempre según W. Bonsiepen, autor de un detallado artículo sobre estas cuestiones), Gren habla de Wärmematerie (materia térmica), Lichtmaterie (materia lumínica), elektrische Materie (materia eléctrica), magnetische Materie (materia magnética), etc.
Conversaciones en Madrid
[251] El instinto de razón de esta conciencia, por ser la ley en sí, al mismo tiempo, concepto, se orienta necesariamente, pero sin saber que es eso lo que quiere, a depurar la ley y sus momentos para dejarla en concepto. Plantea ensayos sobre la ley. Tal como aparece primeramente, la ley se presenta impura, envuelta en ser singular sensible, y el concepto que constituye su naturaleza, hundido en la materia empírica. El instinto de razón orienta sus intentos a encontrar lo que sucede en estas o aquellas circunstancias. La ley parece estar así tanto más sumergida en el ser sensible, pero más bien se pierde en ello. Esa investigación tiene el significado interno de encontrar condiciones pura de la ley; lo que no quiere decir otra cosa —aunque la conciencia que así se expresa se creyera que ella dice otra cosa distinta— que elevar completamente la ley a la figura del concepto a fin de borrar toda atadura de sus momentos a un ser determinado. La electricidad negativa, por ejemplo, que primero se anuncia como electricidad de la resina, igual que la positiva lo hace como electricidad del vidrio, pierde del todo este significado en los experimentos, y se convierte puramente en electricidad positiva y negativa X*1X,5Vide infra Algunas aclaraciones X*1X. ninguna de las cuales pertenece ya a ninguna especie particular de cosas; y deja de poderse decir que hay cuerpos que son eléctricamente positivos y otros que son eléctricamente negativos. Así, también, la relación de los ácidos y las bases y su movimiento recíproco constituye una ley en la que estas oposiciones se manifiestan como cuerpos. Sólo que estas cosas separadas carecen de realidad efectiva; la violencia que arranca a la una de la otra no puede impedirles que vuelvan a entrar enseguida en un proceso; pues ellas sólo son esta referencia, son una respecto de la otra. No pueden permanecer para sí, como un diente o una uña, y ser mostrados de ese modo. Que su esencia sea pasar inmediatamente a un producto neutral hace de su ser un ser asumido en sí, o un ser universal, y los ácidos y las bases tienen verdad sólo como universales. Así, igual que el vidrio y la resina pueden ser eléctricamente tanto positivos como negativos, los ácidos y las bases, en cuando propiedad, no están atados a esta o aquella realidad efectiva, sino que cada cosa sólo relativamente es ácido o base; lo que parece ser decididamente base o ácido, adquiere en las llamadas sinsomatias X*2X6Vide infra Algunas aclaraciones X*2X. el significado contrapuesto a lo otro. — El resultado de los experimentos cancela y asume, de este modo, los momentos o espiritualizaciones en cuanto propiedades de las cosas determinadas, y libera los predicados de sus sujetos. Estos predicados, sólo se los encuentra, tal como son en verdad, como universales; por eso, en virtud de esta autonomía, conservan el nombre de materias X*3X,7Vide infra Algunas aclaraciones X*3X. las cuales no son ni cuerpos ni propiedades, y se evita, desde luego,llamar al oxígeno, etc., electricidad negativa o positiva, o llamar al calor, etc., cuerpo.
Algunas aclaraciones
X*1X
Hegel alude a la teoría de la electricidad de Franklin, que superaba la antiguas (cf. nota XX*X a 00152). Frente a du Fay, Franklin no distingue entre electricidad de la resina o del cristal, sino, en general, entre positiva y negativa, susceptibles ambas de estar en un mismo cuerpo. Cf. Des Herrn Benjamin Franklins Esq. Briefe von der Elektricität. Aus dem Engländischen übersetzer, nebst Anmerkungen von J. C. Wilcke, Leipzig, 1758.
X*2X
La expresión es de J. J. Winterl, a cuya Darstellung der vier Bestandteile der anorganischen Natur («Exposición de las cuatro partes constitutivas de la naturaleza inorgánica», original latino, traducido al alemán por J. Schuster en 1804) se refiere Hegel. Winterl había distinguido entre ácidos y bases. La sinsomatía debía designar un proceso químico determinado por factores no químicos, esencialmente físicos. La expresión «espiritualización» (Begeistung), es igualmente de Winterl, queriendo designar con ella el principio inmaterial que hace a los cuerpos relativamente ácidos o básicos.
X*3X
En la Física y la Química de entonces era frecuente el uso del concepto de materia tal como se encuentra, especialmente, en el Grundriss der Naturlehre, Halle, 1801, de Friedrich Albrecht Carl Gren, libro que Hegel poseía. Se habla allí de materia del calor, materia de la luz, materia eléctrica, materia magnética, materia de tempestades, etc. Cf. Friedrich Albrecht Carl Gren: Grundriss der Naturlehre, op. Cit., §§ 530, 639, 839, 1229 y sigs., 1420 y sigs., 1534.
Conversations in Washington
[251] [251]8We kept the numeration given by the editor in the printed edition Because at the same time the law is in itself the concept, the instinct of reason of this consciousness necessarily sets itself to purifying the law and its moments into concepts but without knowing that this is what it wants to do, and it thus sets up experiments about the law. As the law at first appears, it exhibits itself impurely, as enveloped in singular sensuous being, and the concept which constitutes its nature exhibits itself as sunken into empirical material. In its experiments, the instinct of reason sets itself to finding out what follows in such and such circumstances. The law seems thereby only to be immersed even more in sensuous being, yet in all this, this sensuous being is instead lost. The inner significance of this research is that it finds the pure conditions of the law, and even if the consciousness expressing this should think that by doing so it is saying something different, it is saying that it is supposed to elevate the law entirely into the concept and to do away with all the links its moments have to determinate being. For example, negative electricity more or less first makes itself known as resin-electricity, just as positive electricity more or less first makes itself known as glass-electricity. Through experiment, both entirely lose this significance and become purely positive and negative electricity, neither of which is any longer bound up with things of a particular kind. We then can no longer say that there are bodies which are positively electrical and others which are negatively electrical. In the same way, the relation between acid and base and their movement with regard to each other constitute a law in which these oppositions appear as bodies. Yet these isolated things have no actuality; the violence which tears them apart cannot prevent them from promptly entering again into a process, for they only are this relation. They cannot last on their own,9für sich like a tooth or a claw, and be pointed out in that way. That their essence is to pass over immediately into a neutral product makes their being into a sublated being, or into a universal, and acid and base have truth only in being universal. In the way that glass and resin thus can be positively electrical as well as negatively electrical, so too are acid and base in the same way not bound as properties to this or that actuality. Rather, each thing is only relatively acidic or basic. What seems to be decidedly a base or an acid receives in the so-called synsomates the opposite significance in relation to an other. – In this way, the result of the experiments sublates the moments, or the spiritualizations,10Begeistungen as properties of determinate things, and it frees the predicates from their subjects. It is only as universal, as they are in truth, that these predicates are discovered. On account of this self-sufficiency, they therefore are given the names of matters, which are neither bodies nor properties. One does well to be on one’s guard against using the term, “bodies,” to characterize oxygen, etc., positive and negative electricity, heat, etc.
Conversaciones en el Atrium
EN CONSTRVCCION
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