What is Political Philosophy? III 004
Parte de:
¿Qué es la Filosofía Política? / III. Las soluciones Modernas
Por Leōnardus Strūthiō
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Leōnardī Strūthiī verba
His critique of religion, chiefly of Biblical religion, but also, of paganism, is not original. It amounts to a restatement of the teaching of pagan philosophers, as well as of that medieval school which goes by the name of Averroism and which gave rise to the notion of the three impostors. Machiavelli’s originality in this field is limited to the face that he was a great master of blasphemy. The charm and gracefulness of his blasphemies will however be less strongly felt by us than their shocking character. Let us then keep them under the veil under which he has hidden them. I hasten to his critique of morality which is identical with his critique of classical political philosophy. One can state the main point as follows: there is something fundamentally wrong with an approach to polities which culminates in a utopia, in the description of a best regime whose actualization is highly improbable. Let us then cease to take our bearings by virtue, the highest objective which a society might choose; let us begin to take our bearings by the objectives which are actually pursued by all societies. Machiavelli consciously lowers the standards of social action. His lowering of the standards is meant to lead to a higher probability of actualization of that scheme which is constructed in accordance with the lowered standards. Thus, the dependence on chance is reduced: chance will be conquered.
Hispānice
Su crítica de la religión, principalmente de la religión bíblica, pero también del paganismo, no es original. Es una reiteración de la enseñanza de los filósofos paganos, así como de la escuela medieval denominada averroísmo y que dio origen a la noción de los tres impostores. La originalidad de Maquiavelo en este campo se limita al hecho que fue un gran maestro de la blasfemia. Con todo, el encanto y la gracia de sus blasfemias nos resultarán hoy a nosotros menos subidas de todo que su carácter impactante en su contexto. Vamos, pues, a dejarlas donde están, cubiertas con el velo con que él mismo las ocultó. Me apresuro, pues, a prestar atención a su crítica a la moralidad, que es idéntica a su crítica a la filosofía política clásica. Podemos enunciar su argumento de la siguiente manera: hay algo fundamentalmente erróneo en un acercamiento a las formas de organización política que culmine en una utopía; esto es, en la descripción del mejor régimen cuya puesta en práctica es altamente improbable. Dejemos de orientarnos por la virtud —el más objetivo que una sociedad puede elegir— en nuestro análisis de lo político, y comencemos a orientarnos por los objetivos que realmente son perseguidos por todas las sociedades. Maquiavelo rebaja conscientemente los estándares de la acción social. Su rebaja de los estándares tiene por objeto aumentar la probabilidad de que se realice el plan construido de acuerdo con estos estándares rebajados. De este modo, se reduce la dependencia de la fortuna; la fortuna será vencida.