Nil ultra
MEDVLLA PICTA ***
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Inscripción
NIL VLTRA
(«Nada más allá»)
Subinscripción
Dum mens sana sit, ac salubre corpus
Dum non destituant vel hoc vel illud
Quod natura necessitasque poscit.
Dum notus mihi, cognitus nec ulli,
Scriptis immoriar senex avorum:
NIL VLTRA precibus rogemve votis,
Non terrae modo, sed poli monarcham.
(«Mientras esté sana la mente y saludable el cuerpo
Mientras no falte esto o aquello
Que exigen la naturaleza y la necesidad
Mientras yo sepa quien soy y ninguno me conozca
Habitaré hasta que me haga viejo en los escritos de los antiguos
NADA MÁS ALLÁ pediré con ruegos o votos
No solo rey de la Tierra, sino del Universo»).
Glosa
El caracol durante el Renacimiento y el Barroco representa la pobreza y la sabiduría de quien nada tiene. Esto era atribuido al hecho que el caracol lleva su morada, todo lo que poseé, consigo. Se empleó para simbolizar la frase de Bías de Priene «Omnia mea mecum porto» («llevo conmigo todo lo que poseo»), al despedirse de sus conciudadanos sin equipaje alguno.1Tulio en Paradoxa Stoicorum, I, 8. Por su parte DIÓGENES LAERCIO, en sus declaraciones sobre Bías (Vitas philos., I, 82-88), no menciona nada al respecto; hay una anécdota similar atribuida a Estilpón (vid. II, 115). Finalmente, nuestro Lucio atribuye el dicho a Demetrio Poliorcetes (Demetrio I de Macedonia) en Ep. ad Luc. I, IX, 19 y De const. sap., 5, 6. Es también un símbolo del autoconocimiento, pues el caracol nunca abandona su habitación pese a moverse por el mundo.
El anillo suele representar un compromiso, baste recordar el anillo nupcial, el pastoral, o el anillo del Pescador papal. Muchas son las leyendas que nos hablan de anillos mágicos o poderosos, pero recordamos la que cuenta que la sabiduría de Salomón provenía de un anillo otorgado por Dios.2Primero mencionado por FLAVIO JOSEFO (Antiq. Juda., 8, 41-49), pero con fuertes atribuciones místicas y esotéricas desde su mención en el Sefer HaRazim.
La corona es siempre marca de poder, soberanía. Siendo Dios el Soberano supremo, se supone que puede coronar a los hombres con su Gracia y bendiciones.
La imagen del emblema nos remite al epigrama del autor. No podemos retirarnos del mundo, ni dejar de depender de las necesidades de nuestro cuerpo. Pero, podemos estar ‘por encima’ del mundo, en cuanto a compromiso con la sabiduría. Proceso arduo, impreso en los trabajos de los que intentan ascender a la ermita en el monte. Finalmente, el verdadero señorío proviene de ser dueño de sí mismo (fruto del autoconocimiento), de ahí que el caracol no esté coronado en la cabeza, sino en la espiral de su hogar (el autoconocimiento).3Exhortamos al lector atento a buscar las ingeniosas relaciones entre el laberinto —casi siempre en forma de espiral— y el autoconocimiento.
Fuente
Bruck, Jacobus à [Jacob von Bruck, llamado Angermundt, probablemente oriundo de Breslau; datos biográficos desconocidos], IACOBI a BRUCK ANGERMUNDT cogn. sil. EMBLEMATA MORALIA & BELLICA. Nunc recens in Lucem edita. (Argentorati, per Iacobum ab Heyden Iconographum. Anno M D C XV.)
Temática
- Anillo
- Suficiencia feliz
Iura
Redacción de la glosa: Gibrán de Lastanosa Morelli (gibranus).
Traducción de la inscripción y de la subinscripción: Adrián de Balaustier (hadrianus).
© ATRIVM PHILOSOPHICVM 2022.
Notas
- 1Tulio en Paradoxa Stoicorum, I, 8. Por su parte DIÓGENES LAERCIO, en sus declaraciones sobre Bías (Vitas philos., I, 82-88), no menciona nada al respecto; hay una anécdota similar atribuida a Estilpón (vid. II, 115). Finalmente, nuestro Lucio atribuye el dicho a Demetrio Poliorcetes (Demetrio I de Macedonia) en Ep. ad Luc. I, IX, 19 y De const. sap., 5, 6.
- 2Primero mencionado por FLAVIO JOSEFO (Antiq. Juda., 8, 41-49), pero con fuertes atribuciones místicas y esotéricas desde su mención en el Sefer HaRazim.
- 3Exhortamos al lector atento a buscar las ingeniosas relaciones entre el laberinto —casi siempre en forma de espiral— y el autoconocimiento.